Descripción
En Isil, pueblo conocido por su tradición de fallas, encontramos Casa Fuster. Esta era una casa ganadera de toda la vida donde vivía Josep Maria, antiguo propietario de un rebaño de una veintena de vacas. Llegado a un punto, Josep Maria se vio obligado a suavizar su compromiso con la ganadería. Fue entonces cuando decidieron junto a su sobrino hacer una asociación y sacar adelante la explotación.
Actualmente, el principal responsable de esta explotación ganadera es Xavier de Casa Campaner. Él, junto con su tío, han logrado mantener la tradición ganadera de Casa Fuster y conservar una de las pocas explotaciones de vacuno que quedan en Isil. Para ellos, mantener esta ganadería era una cuestión de valores y aprecio por su oficio: “Antiguamente, muchas de las casas de Isil tenían alguna vaca u otra. Ahora, solo quedamos tres explotaciones. No podríamos permitirnos perder otra”.
Por ahora, Xavier trabaja activamente para dar continuidad a Casa Fuster y ansía hacerlo durante muchos años más. Asimismo, ayuda a conservar la historia ganadera del valle y, de paso, el mosaico paisajístico que ha caracterizado siempre los Pirineos.